La hiedra, también conocida como hedera, es una planta trepadora que puede resultar bastante invasiva si no se controla adecuadamente. Esta planta puede cubrir y dañar árboles, setos y estructuras, por lo que es importante eliminarla de manera efectiva. En este artículo, te presentaremos 4 formas efectivas de deshacerte de la hiedra. Desde determinar el grado de cobertura hasta retirarla por completo, encontrarás aquí las técnicas necesarias para acabar con esta planta molesta. No te preocupes, ¡la hiedra no resistirá a tus esfuerzos!
Determina el grado de cobertura de la hiedra

Antes de comenzar a eliminar la hiedra, es importante determinar el grado de cobertura que esta tiene en el árbol o la estructura. Examina detenidamente el área afectada y evalúa la cantidad de hiedra presente. Esto te permitirá planificar de manera adecuada el proceso de eliminación y seleccionar las herramientas necesarias para llevar a cabo el trabajo.
Recuerda que la hiedra puede crecer rápidamente y enredarse profundamente en la superficie a la que se adhiere. Por lo tanto, es esencial tener en cuenta la extensión de su cobertura antes de proceder con los siguientes pasos.
Retira la parte inferior de la hiedra

Una vez que hayas determinado el grado de cobertura de la hiedra, es hora de comenzar a retirarla. En primer lugar, te recomendamos que comiences por la parte inferior de la planta. Para hacer esto, localiza la base de la hiedra y corta todos los tallos y ramas que se encuentren en el suelo.
Utiliza tijeras de podar o una sierra para realizar los cortes. Asegúrate de que las herramientas estén afiladas y limpias antes de utilizarlas. Si la hiedra ha crecido de forma muy densa, puedes utilizar un cortacésped para cortarla a nivel del suelo.
Recuerda siempre utilizar equipo de protección personal, como guantes y gafas de seguridad, para evitar lesiones durante este proceso.
Corta la hiedra del tronco en secciones
Una vez que hayas retirado la parte inferior de la hiedra, es hora de dirigirte al tronco del árbol o la estructura. Para cortar la hiedra de manera efectiva, te recomendamos hacerlo en secciones. Esto facilitará el proceso y evitará daños innecesarios.
Comienza cortando la hiedra cerca del suelo utilizando una sierra de mano o una herramienta similar. Realiza un corte limpio y preciso para evitar dañar el árbol o la estructura.
A medida que cortas la hiedra en secciones, asegúrate de mantener un equilibrio en el peso. Si cortas demasiado de un lado, la hiedra podría desequilibrarse y caer, lo que podría resultar en daños adicionales.
Recuerda utilizar siempre equipo de protección personal y asegurarte de tener un control firme de la herramienta que estás utilizando.
Vuelve a cortar la hiedra en un nivel más alto
Una vez que hayas cortado la hiedra en secciones cerca del suelo, es hora de subir un poco más y cortarla en un nivel más alto. Esto ayudará a debilitar aún más la planta y evitará que crezca nuevamente.
Utiliza una escalera o un sistema de arneses seguro para llegar a la parte superior de la hiedra. Una vez allí, utiliza una sierra de mano o una herramienta similar para cortar la hiedra cerca del tronco o la estructura.
Recuerda siempre asegurarte de tener un soporte seguro mientras trabajas en alturas y usar equipo de protección personal adecuado.
Retira la hiedra restante, incluyendo trozos más pequeños y raíces intactas
Una vez que hayas cortado la hiedra en un nivel más alto, es hora de retirar los restos de la planta. Esto incluye tanto los trozos más pequeños de hiedra que puedan haber quedado como las raíces intactas.
Utiliza una pala para cavar alrededor de las raíces y levantarlas del suelo. Si encuentras raíces muy profundas, es posible que necesites una herramienta más robusta, como una pala de bordes afilados. Asegúrate de retirar todas las raíces, ya que si alguna queda en el suelo, la hiedra podría volver a crecer.
Revisa cuidadosamente el área afectada para asegurarte de que no quedan restos de hiedra. Puedes utilizar una escoba o un rastrillo para limpiar el suelo y eliminar cualquier rastro de la planta.
Conclusión
Eliminar la hiedra puede ser un proceso desafiante, pero con las técnicas correctas puedes asegurarte de deshacerte de ella de manera efectiva. Recuerda determinar el grado de cobertura de la hiedra antes de comenzar a retirarla, y realiza los cortes en secciones para facilitar el proceso. No olvides cortar la hiedra en un nivel más alto y retirar los restos, incluyendo los trozos más pequeños y las raíces intactas.
Como siempre, el uso de equipo de protección personal es clave para garantizar tu seguridad durante todo el proceso. No subestimes la persistencia de la hiedra, pero tampoco subestimes tu capacidad para deshacerte de ella. Con paciencia y perseverancia, podrás disfrutar de un jardín o una estructura libre de esta planta invasiva. ¡Buena suerte en tu lucha contra la hiedra!